Durante la reciente emisión del segundo episodio de la decimotercera temporada de MasterChef en España, un suceso inesperado conmocionó tanto a los participantes del concurso como a la audiencia. Un concursante llamado Flores, quien se desempeña profesionalmente como adiestrador canino en Alicante, sufrió un grave colapso en el plató que generó gran preocupación y evidenció el alto nivel de estrés al que están sometidos los aspirantes a convertirse en el próximo MasterChef.
El episodio en cuestión desafiaba a los concursantes a preparar un plato libre utilizando ingredientes de color amarillo, con la opción de complementar su creación con ingredientes adicionales como alcachofas, cordero o lenguado, bajo la condición de reducir su tiempo de cocina. Flores, quien optó por incluir cordero en su preparación, se enfrentó al reto con 35 minutos menos de tiempo disponible para cocinar debido a su elección.
Antes de comenzar la competencia, Flores solicitó una silla al equipo de producción, explicando que sufría de problemas de espalda a raíz de un accidente ocurrido en su juventud. A pesar de las precauciones, el intenso dolor no tardó en manifestarse, exacerbado por la presión del concurso. El aspirante reveló al juez Pepe Rodríguez que padecía de una hernia discal, una lesión originada en un accidente laboral anterior que casi le cuesta su capacidad de movilidad.
Cuando faltaban solo momentos para completar su plato, Flores intentó levantarse para alcanzar un plato, pero fue vencido por el dolor, incapaz de regresar a su estación de trabajo. A pesar de las sugerencias de sus compañeros para que pidiera ayuda, el concursante intentó resistir hasta que, finalmente, un agudo dolor provocó su colapso en el estudio.
La rápida intervención de Pepe Rodríguez, quien solicitó una ambulancia, fue crucial. Flores, entre lágrimas, fue atendido por los servicios médicos y trasladado a un hospital. Este evento no solo le obligó a abandonar la competencia, sino que también dejó una marca indeleble en el programa y en quienes lo siguen.
La situación ha generado una ola de apoyo hacia Flores por parte de la comunidad de MasterChef y la audiencia, quienes le desean una pronta recuperación y esperan verlo regresar a sus actividades de cocina y adiestramiento canino. Este incidente subraya la importancia de anteponer la salud personal ante las exigencias de cualquier desafío o competición, una lección valiosa tanto para los actuales como para futuros concursantes.