Madrid se prepara para acoger un evento de gran relevancia en el ámbito internacional: la XXX Cumbre Iberoamericana, programada para el año 2026. La noticia fue anunciada oficialmente por José Manuel Albares, el ministro de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación, durante una rueda de prensa en la que también estuvo presente Andrés Allamand, el secretario general iberoamericano.
Este será el cuarto encuentro de este tipo que España organiza desde la creación de la cumbre en 1991 en Guadalajara, México. La historia de España en estas reuniones se remonta a 1992, cuando Madrid fue la primera ciudad en albergar el evento, seguido por Salamanca en 2005 y Cádiz en 2012. La Cumbre Iberoamericana, que inicialmente se celebraba cada año, se convirtió en bianual a partir de 2014, y reúne a los líderes de los 22 países que constituyen la Comunidad Iberoamericana.
La elección de España como sede para 2026 fue una decisión unánime alcanzada en julio pasado, que pone de manifiesto la confianza y la estrecha colaboración entre los países miembros. La cumbre más reciente, que se llevó a cabo en Cuenca, Ecuador, en noviembre del año anterior, tuvo una notable cantidad de ausencias de jefes de Estado y de Gobierno. Sin embargo, se destacó por la presencia del Rey Felipe VI, el presidente portugués Marcelo Rebelo de Sousa y el presidente ecuatoriano anfitrión, Daniel Noboa.
La elección de Madrid no solo subraya el papel crucial de España en la comunidad iberoamericana, sino que también abre la puerta a fortalecer los lazos políticos, económicos y culturales entre los países participantes. Este evento ofrecerá una valiosa plataforma para discutir retos comunes y definir nuevas estrategias hacia el desarrollo sostenible y la cooperación regional, en un contexto internacional que está en constante evolución.