Este sábado 18 de mayo, se celebra una jornada crucial en la División de Honor Plata masculina de balonmano. El equipo ID Energy Caserío, ya clasificado para la fase de ascenso a Asobal, juega con la ambición de ser anfitrión en dicha fase, una ventaja significativa en su lucha por alcanzar la máxima categoría. Para lograrlo, deberán superar en la clasificación al Burgos, enfrentándose al Alcobendas, un equipo que lucha por no descender, en un emocionante encuentro en el Quijote Arena. El desenlace de esta jornada no solo decidirá el orden final de los equipos, sino también el lugar de celebración de la próxima fase de ascenso.
La importancia de esta jornada traspasa al Caserío, involucrando a varios equipos con objetivos distintos, desde lograr ser sede de la fase de ascenso hasta evitar el descenso. El Burgos y el Alcobendas se juegan mucho en sus respectivos partidos, lo que añade tensión y emoción a la jornada. Si el Caserío logra superar al Alcobendas y el Burgos no consigue ganar su partido, el equipo de Ciudad Real tendrá la oportunidad de organizar la fase de ascenso, un aliciente considerable para ellos y sus aficionados.
La División de Honor Plata masculina presenta un final de temporada lleno de incertidumbres y emociones, donde varios equipos como el Cisne y el Trops Málaga aún luchan por posicionarse de la mejor manera posible de cara a la fase de ascenso a ASOBAL. Ciudad Real sigue siendo una posible sede para esta importante fase, dependiendo de los resultados de la última jornada, lo que mantiene en vilo tanto a equipos como aficionados con la esperanza de ascender a la categoría superior del balonmano nacional.