En una conversación reciente, una limpiadora profesional y una experta en orden compartieron sus secretos mejor guardados para mantener un hogar con un aroma fresco y agradable en todo momento. Ambas especialistas coinciden en que no se trata solo de limpiar, sino de crear hábitos constantes y utilizar ciertos trucos cotidianos que hacen la diferencia.
Uno de los primeros consejos de la limpiadora profesional es ventilar bien todos los días. «Abre las ventanas al menos veinte minutos por la mañana. Esto no sólo cambia el aire, sino que reduce los olores acumulados», explica. Aconseja también el uso de productos naturales como el vinagre y el bicarbonato de sodio, que no solo limpian, sino que también neutralizan malos olores sin dejar residuos químicos.
Por otro lado, la experta en orden enfatiza la importancia de tener cada cosa en su lugar. «El desorden puede acumular polvo y otros residuos que generan malos olores. Una casa ordenada es más fácil de mantener limpia y libre de olores desagradables», afirma. Además, recomienda tener plantas de interior, como el aloe vera o el jazmín, que no solo mejoran la calidad del aire, sino que también añaden una fragancia natural y agradable al hogar.
Ambas profesionales sugieren el uso de aceites esenciales como una solución fácil y efectiva. «Puedes mezclar algunos aceites esenciales con agua y rociar los espacios. El aceite de lavanda, el eucalipto y el limón son mis favoritos y nunca fallan», añade la limpiadora.
La experta en orden también sugiere algo más: cuidar los textiles. «Las alfombras, cortinas y cojines pueden atrapar olores. Lava estos artículos regularmente y usa bolsitas de tela con bicarbonato de sodio dentro de los zapatos o armarios para absorber olores.»
Siguiendo estos sencillos pero efectivos consejos, es posible asegurar que cualquier hogar mantenga un aroma fresco y agradable diariamente. Así, los habitantes podrán disfrutar de un espacio acogedor, libre de olores molestos y con una atmósfera de armonía y tranquilidad.