El municipio de Almedina, en Ciudad Real, se prepara para celebrar su noveno festival Almedinamora, una festividad que iluminará sus calles con 20.000 velas durante las noches del 2 y 3 de agosto, extendiéndose con diversas actividades hasta el domingo 4 de agosto.
Almedina, situada en pleno campo de Montiel, revive sus orígenes musulmanes durante este primer fin de semana de agosto. Este evento, que comenzó en 2016 gracias a la iniciativa de los vecinos organizados a través de WhatsApp, ha crecido hasta convertirse en una tradición esperada por la comunidad y visitantes por igual.
El festival Almedinamora no solo es un despliegue de luces y belleza, sino también una celebración de la rica historia de Almedina. Durante la dominación musulmana, el municipio alcanzó su auge, sirviendo como fortaleza estratégica en la entrada de Sierra Morena, protegiendo el camino frecuentado por los ejércitos. Esta celebración busca recordar esa época y el legado que dejaron.
Los preparativos para Almedinamora implican a toda la comunidad. Vecinas y vecinos decoran las fachadas de sus casas y distribuyen las 20.000 velas por el casco antiguo del municipio, creando impresionantes dibujos a lo largo de las cuestas que dan acceso a la localidad. Además, aquellos que tuvieron que marcharse de Almedina marcan este fin de semana en sus calendarios para regresar y colaborar con esta festividad, fortaleciendo los lazos comunitarios y la conexión con su historia.
José Antonio Talavera, alcalde de Almedina, destaca la importancia de esta celebración y el esfuerzo colectivo que conlleva. «Este festival es una forma de recordar lo que fuimos y lo que somos», mencionó. Talavera también señaló su reciente solicitud al Ministro de Cultura para la devolución de un cuadro del pintor local Yáñez de Almedina, subrayando la importancia de reivindicar y preservar la historia y cultura del municipio.
La celebración comenzará el viernes a las 21:00 horas con el encendido de las velas, seguido de la inauguración del zoco árabe con la participación de los caballeros del califato y la asociación Al-madinat, donde se leerán pergaminos históricos. El festival concluirá el domingo con un especial pasacalles organizado por la Asociación de Vecinos Al-madinat, poniendo fin a un fin de semana lleno de magia y tradición.
La localidad espera recibir a cientos de visitantes durante el festival. Los dos alojamientos dependientes del Ayuntamiento, que cuentan con una treintena de camas, han estado ocupados desde hace varios meses, reflejando el interés y la anticipación que genera este evento. «Animamos a todos a visitarnos y disfrutar de nuestro casco antiguo iluminado solo con la luz de las velas», invitó el alcalde Talavera.
Almedinamora es más que una celebración; es un viaje al pasado, un homenaje a la historia y una muestra del espíritu comunitario que caracteriza a este encantador municipio de Ciudad Real.
