En la noche del miércoles, la televisión española experimentó con un nuevo formato de debate bajo el título «Demos: el gran sondeo». Este programa, transmitido por Telecinco y capitaneado por el conocido Risto Mejide, se presenta como una plataforma donde la diversidad de la sociedad española encuentra representación excluyentemente a través de la edad. La intención detrás de este diseño no es otra que recrear un espacio que sirva de espejo a un congreso de ciudadanos, promoviendo un diálogo rico y variado sobre los temas que actualmente inquietan a la población.
El debut de «Demos» generó una notable división de opiniones, situándose en el corazón de un debate público tanto por la elección de su primer gran tema de discusión: la crisis habitacional en España, como por los participantes reclutados para dialogar sobre él. La problemática de la vivienda, con sus intrínsecas diferencias de clase social y acceso a la propiedad, propició un terreno fértil para el debate, pero también para el enfrentamiento.
La respuesta del público no se hizo esperar, manifestándose a través de las redes sociales con comentarios que abarcaban todo el espectro de reacciones posibles. Mientras algunas voces criticaban la aparente selección intencionada de participantes, que parecía favorecer los intereses de la cadena, otras lamentaban la inclusión de figuras ya reconocidas, como Carla Galeote, conocida por su activismo feminista en TikTok, desatando tanto críticas como apoyos.
Los usuarios de X (anteriormente conocido como Twitter) expresaron desde su descontento por lo que algunos percibían como actitudes forzadas de los participantes en busca de notoriedad, hasta una valoración positiva por abordar cuestiones críticas como el mercado del alquiler, las hipotecas y las políticas habitacionales. Aun con sus momentos de tensión, como el enfrentamiento verbal entre Mejide y uno de los participantes, «Demos: el gran sondeo» ha logrado captar la atención y el interés del público hacia este formato.
A pesar de las críticas, una parte del público ha visto con buenos ojos la propuesta de Telecinco, manifestando su deseo de que el programa no solo perdure sino que se hagan ajustes en la programación que faciliten su seguimiento. En suma, el lanzamiento de «Demos» ha sacudido el panorama del debate televisivo en España, abriendo un espacio para la reflexión sobre cómo los medios pueden contribuir a la discusión de asuntos de interés público. Resta ver si en los próximos episodios el programa logra equilibrar las expectativas de sus seguidores y detractores, consolidándose como un punto de encuentro para el análisis de los temas que mueven a la sociedad española.
