En la televisión matinal de Andalucía, el programa «Hoy en día» de Canal Sur TV ha sido elogiado por su enfoque en el análisis social y su esfuerzo por mantenerse al margen de la polarización política que a menudo domina los medios. Sin embargo, recientemente, durante una transmisión que prometía ser como cualquier otra, la armonía habitual del programa fue brevemente perturbada. Iván Gelibter, uno de los colaboradores del programa, introdujo un tema con tintes políticos en una discusión que hasta entonces había sido meramente social. Esto suscitó una respuesta inmediata de Toñi Moreno, la presentadora del programa, quien delicadamente, pero con una firmeza notoria, recordó a Gelibter y a la audiencia el ethos del programa.
La conversación originalmente buscaba arrojar luz sobre la situación en Torre Pacheco, una localidad que ha experimentado ciertas tensiones recientemente, desde una perspectiva social más amplia que transcindiese la polarización política habitual. La referencia de Gelibter a un partido político específico durante la entrevista marcó un giro inesperado que Moreno no tardó en corregir. “Nosotros vamos a poner ahí el acento”, afirmó Moreno, subrayando el compromiso del programa con una narrativa que se centra en la experiencia y las perspectivas de los ciudadanos afectados por diversas situaciones.
Moreno sugirió que las discusiones sobre política tenían su lugar, pero no en «Hoy en días», donde el objetivo principal es explorar la dimensión humana de los acontecimientos sociales. Instó a Gelibter a considerar otros espacios dentro del mismo medio para discutir asuntos políticos, como el programa «Mesa de análisis», que se presta más a ese tipo de debate.
La intervención de Moreno fue más que una mera corrección en vivo; fue una defensa apasionada de un periodismo que busca ir más allá del relato partidista, que escucha y amplifica las voces de aquellos en el epicentro de la noticia pero fuera del foco de los debates electorales. A través de este enfoque, «Hoy en día» aspira a ofrecer a su audiencia una comprensión más completa de los asuntos que afectan a su comunidad, presentando una visión equilibrada que incluya todas las caras de una historia.
El incidente no solo fue un reto para Gelibter, sino también una oportunidad para reiterar el compromiso del programa de servir como un canal de comunicación genuino y centrado en la sociedad. Este compromiso con el análisis social sobre la política refleja un anhelo en el periodismo actual por espacios que fomenten el entendimiento y la empatía en lugar de la división.