En una reciente edición matutina del programa Espejo Público, conducido por Susanna Griso, se trajo a colación una temática compleja y muy actual en la discusión pública española: la gestión y la percepción de los menores extranjeros no acompañados, conocidos por el acrónimo MENA, y los retos de integración que enfrentan.
El punto de partida de la discusión fue la manifestación organizada por Vox en Alcalá de Henares, en respuesta a un trágico suceso: la violación de una joven de 18 años, presuntamente cometida por un migrante. Sin embargo, lo que resalta de este caso no es solo el acto en sí, sino las dudas que surgen respecto a la situación legal y la edad del agresor, quien parece tener un historial de delitos previos y se le han atribuido múltiples identidades. Según Griso, este habría estado en un centro abierto a pesar de su historial, cuando las circunstancias sugerirían que un centro cerrado hubiera sido más adecuado.
Incidencias similares, como la detención de dos menores de un centro de inmigrantes en Fuenlabrada tras agredir a una trabajadora, contribuyen a la sensación de inseguridad y desconfianza entre algunos sectores de la comunidad. Esto quedó evidenciado por las palabras de Beni, un vecino de Fuenlabrada, quien compartió su percepción de una amenaza inminente una vez que estos jóvenes sean liberados sin recursos ni apoyos.
Sin embargo, Susanna Griso intervino para ofrecer una perspectiva que tiende a olvidarse en medio del calor de dichos incidentes. Destacó que los MENA no deben ser vistos como inmigrantes ilegales sino como menores en busca de protección. Según Griso, aunque existen casos de MENA involucrados en delitos, constituyen una minoría dentro de este grupo, la mayoría de los cuales no presenta comportamientos problemáticos.
Más aún, Griso aportó a la discusión su experiencia personal con la adopción de un joven africano, lo cual le da un entendimiento profundo y matizado sobre los desafíos que enfrentan estos jóvenes y la importancia de ofrecerles apoyo y una oportunidad para su integración.
La discusión en Espejo Público, si bien centrada en un evento específico y opiniones divergentes, saca a la luz la profunda complejidad y las diversas dimensiones que conforman el debate sobre la inmigración y la integración de los menores no acompañados. En un ambiente marcado por el miedo y la incertidumbre, el diálogo informado y empático emerge como una herramienta fundamental para fomentar el entendimiento y la cohesión social en una sociedad cada vez más diversa.