La situación del acceso a tratamientos oncológicos en España ha alcanzado un punto alarmante, según la reciente actualización de la Fundación Alivia sobre su herramienta Oncoindex, la primera de su tipo en medir el acceso a terapias recomendadas por la Sociedad Europea de Oncología Médica (ESMO). Los datos presentan un descenso notable en el índice general del país, que ha caído de 54 a 50 puntos en solo un año.
Este deterioro es especialmente crítico en el ámbito del cáncer de mama. Actualmente, el acceso a tratamientos efectivos ha experimentado limitaciones significativas. En abril se definían cinco terapias completamente financiadas, con diez que presentaban restricciones y sin respaldo clínico, además de tres sin financiación. La situación ha empeorado, dejando a más pacientes sin opciones accesibles que podrían salvar vidas.
Sin embargo, el problema no se limita al cáncer de mama. Enfermedades como el cáncer de hígado, cáncer de estómago, linfoma no Hodgkin y leucemia linfoblástica aguda muestran un acceso aún más restringido. La cantidad de terapias recomendadas no alcanza ni la mitad de las que están disponibles en otros países europeos, evidenciando una preocupante disparidad en el sistema de salud pública español.
De un total de 173 terapias revisadas, el 27% está financiado sin limitaciones, el 46% tiene restricciones y otro 27% no está disponible en la sanidad pública. Esta situación genera desigualdades y situaciones críticas, en las que muchos pacientes tienen que esperar demasiado tiempo para acceder a tratamientos que podrían mejorar su pronóstico de manera significativa.
Otro aspecto alarmante es el tiempo de espera para el acceso a nuevos medicamentos. En países como Alemania, Dinamarca y Suecia, la media de tiempo desde la aprobación en Europa hasta la inclusión en sus sistemas de salud es de menos de un año. En contraste, en España este tiempo supera los 600 días e, incluso, se registran casos que van más allá de los 1.600 días. Este retraso puede tener consecuencias fatales, agravando la situación de quienes padecen cáncer.
Ante esta realidad, la Fundación Alivia ha manifestado su preocupación y demanda cambios urgentes. Su portavoz señala que es inaceptable que el índice del cáncer de mama se haya desplomado en casi un 15% en tan corto periodo. La fundación exige compromisos concretos que incluyen asegurar la financiación completa de tratamientos basados en la evidencia, reducir el tiempo de acceso a menos de 12 meses desde su aprobación en Europa, y eliminar restricciones que no cuenten con justificación clínica.
Desde su creación en 2021, la Fundación Alivia ha trabajado incansablemente en España para mejorar el acceso a tratamientos oncológicos, ofreciendo recursos y apoyo a pacientes y familiares, con el propósito de transformar la atención oncológica en el país.
En resumen, estos datos no solo muestran una preocupante tendencia, sino que requieren una respuesta urgente y un compromiso real de quienes toman decisiones en el ámbito sanitario. Es fundamental generar conciencia y actuar para garantizar que todas las personas con cáncer puedan recibir el tratamiento necesario, en el tiempo adecuado y en condiciones de igualdad.