El Obrador de Goya, reconocida cadena de repostería madrileña, ha revolucionado los escaparates navideños con sus nuevos Troncos de Navidad: Dubái y Ferrero. Estas delicias fusionan la tradición con un toque moderno, convirtiéndose en imprescindibles para las fiestas venideras.
El tronco Dubái destaca por la armonía entre un bizcocho esponjoso y una delicada crema de chocolate. Su acabado, brillante y elegante, evoca la esencia de la alta pastelería. Inspirado en los sabores de Oriente Medio, combina notas de dátil, pistacho y vainilla especiada, ofreciendo una experiencia novedosa que satisface a quienes buscan un equilibrio entre lo original y lo tradicional.
Por su parte, el tronco Ferrero es un homenaje a los amantes del chocolate. Esta creación mezcla chocolate con avellanas, logrando una textura que equilibra lo cremoso y lo crujiente, convirtiéndose en un placer para todas las edades y un éxito garantizado en cualquier reunión festiva.
Ambos troncos se suman a las opciones clásicas de la marca, conocidas por sus chocolates intensos y rellenos generosos. Elaborados diariamente en el amplio obrador de Getafe, un equipo de 30 profesionales emplea métodos artesanales para asegurar la frescura y calidad en cada producto, que es luego distribuido entre sus tiendas en Madrid, Málaga y Barcelona.
El Obrador de Goya tiene planes de expansión ambiciosos: espera terminar 2025 con 30 establecimientos y alcanzar 50 en tres años. Este crecimiento contempla la apertura de nuevas franquicias y locales propios, enfocándose en Madrid, Andalucía y la Comunidad Valenciana, para consolidar su liderazgo en el sector.
Con un precio de 24,50 euros por unidad, estos Troncos de Navidad no solo impresiona por su calidad y presentación, sino que también reafirma la posición de la compañía como un referente en repostería artesanal. La empresa sigue comprometida con conquistar el paladar de sus clientes mediante propuestas innovadoras y fieles a la tradición.


