Lucas Alcaraz ha regresado al Granada CF, pero esta vez ocupa el cargo de Director de la Ciudad Deportiva, una posición más alejada del banquillo y que le permite influir en el club desde una nueva perspectiva. Su trayectoria con la entidad nazarí es rica y profunda, marcada por más de 80 partidos dirigidos desde su debut en 1995, un camino lleno de altibajos que ha visto su nombre resonar en tiempos de crisis.
Desde sus inicios, Alcaraz ha mantenido una relación casi matrimonial con el Granada, que se traduce en constantes idas y venidas, con cada crisis del equipo reavivando la posibilidad de su retorno. Aunque aceptó distintas ofertas a lo largo de su carrera, incluyendo aventuras en ligas internacionales, su figura siempre ha estado asociada al club andaluz.
En este momento, el Granada CF enfrenta uno de sus comienzos más complicados en la LaLiga Hypermotion, con un Pacheta en apuros que no está logrando los resultados esperados. Las expectativas en la Ciudad Deportiva son altas, y el regreso de Alcaraz podría ser visto como esa solución rápida que muchos anhelan en situaciones complicadas.
El próximo encuentro contra el Burgos, seguido por un crucial partido ante Huesca, podría ser decisivo para el futuro inmediato del club. La presión es palpable, y la posibilidad de que Alcaraz regrese al banquillo se convierte en un tema recurrente entre los aficionados y la directiva. Con su experiencia y conocimiento del club, es un candidato natural para asumir las riendas en un momento de necesidad, enfrentando el desafío de estabilizar el barco en medio de la tormenta.