La aclamada actriz Ana Garcés, recordada por su icónica interpretación de Jana en la serie de televisión «La Promesa», ha anunciado su salida del show, un acontecimiento que ha conmovido profundamente tanto a la audiencia como al equipo de producción. Tras más de 500 episodios encarnando a este querido personaje, Garcés ha decidido no continuar, marcando el final de una era para la trama y sus seguidores.
En conversaciones con el medio VemosTV, Garcés reveló que la decisión de finalizar la historia de Jana fue un acuerdo mutuo con los creadores de la serie. Aunque esperaba que su partida causara cierta conmoción, la magnitud de la respuesta de los seguidores fue algo que no logró anticipar. Esto subraya el impacto significativo que su personaje ha tenido en el público a lo largo de los años.
El proceso para sacar a Jana de la serie no fue algo decidido de la noche a la mañana. Garcés y el equipo detrás de «La Promesa», incluido el creador y productor Josep Cister, dedicaron un buen tiempo a reflexionar sobre el mejor curso de acción. La actriz desmintió cualquier rumore sobre una salida abrupta, explicando que se tomaron diversas conversaciones avanzadas antes de llegar a la decisión final.
Uno de los aspectos más importantes para Garcés era asegurarse de que la trama de Jana se cerrara de manera adecuada, evitando dejar su historia en un limbo. La actriz detalló cómo su contrato fue extendido específicamente para permitirle terminar su papel de una manera que honrara tanto al personaje como a la audiencia.
La decisión de Garcés de dejar «La Promesa» no solo estuvo influenciada por motivos narrativos, sino también por deseos personales de reevaluar su carrera y vida personal. A pesar de su amor y dedicatoria al proyecto, la actriz sintió la necesidad de buscar un nuevo equilibrio, subrayando que su partida no se debió a la falta de compromiso o pasión hacia su personaje.
La salida de Garcés cierra un capítulo significativo en «La Promesa», no solo poniendo fin a una de sus más largas tramas sino también planteando incógnitas sobre el futuro de la serie sin uno de sus personajes centrales. La determinación de la actriz en su actuación y en su decisión de salida enfatiza la naturaleza evolutiva del medio televisivo, en el que cada final abre la puerta a nuevos comienzos.