Después de padecer un resfriado, es común que algunas personas noten una sensación de oídos taponados, un problema que podría no atribuirse exclusivamente al cerumen, sino a la acumulación de mocos en los oídos. Este fenómeno, aunque molesto, puede ser solucionado con remedios caseros simples.
La aparición de mocos en los oídos generalmente es resultado de enfermedades como resfriados, gripes o sinusitis. Estas afecciones pueden causar una acumulación de mucosidad que se desplaza hacia el oído medio, obstruyendo las trompas de Eustaquio. Dicha obstrucción evita el drenaje adecuado de líquidos, lo que podría resultar en la formación de tapones de moco. Sin el drenaje apropiado, el riesgo de sufrir infecciones auditivas puede incrementar.
Los síntomas más evidentes de esta condición incluyen una sensación de taponamiento en el oído, que puede conllevar a una hipoacusia temporal. Asimismo, es posible experimentar vértigo o mareos, picazón en el oído, sonidos de pitidos conocidos como tinnitus y riesgo de infecciones auditivas.
Entre las causas más comunes de esta situación se encuentran los resfriados, infecciones respiratorias, rinitis alérgica y no alérgica, pólipos nasales y otitis media. Aunque menos frecuentes, las infecciones bacterianas, la exposición al humo del tabaco y la contaminación, así como las malformaciones congénitas también pueden desencadenar la producción de mucosidad en el oído.
Para aliviar la acumulación de mocos en el oído, se pueden emplear varias estrategias sin necesidad de acudir a intervenciones médicas inmediatas. Entre ellas, aplicar compresas húmedas y tibias sobre el oído puede suavizar el moco y facilitar su drenaje, al tiempo que reduce la inflamación. La inhalación de vapor, ya sea mediante un humidificador o agua hirviendo con añadido de eucalipto, puede descongestionar las vías respiratorias. Utilizar suero fisiológico o preparar una solución salina en casa puede ser efectivo para drenar la mucosidad. Cambiar de posición, como inclinar la cabeza o dormir sobre el oído no afectado, puede favorecer el drenaje nocturno. Además, aplicar crema mentolada en el pecho ayuda a descongestionar, aunque los descongestionantes farmacéuticos deberían usarse previa consulta médica.
La otitis serosa, una inflamación del oído medio que puede acumular mocos, es más común en invierno y durante la temporada de gripe. Aunque el taponamiento puede persistir tanto como la infección subyacente, con estos métodos, el alivio puede encontrarse de forma más rápida. Si los síntomas continúan o empeoran, es crucial buscar la orientación de un profesional médico.
