Un grupo de migrantes ha tomado la antigua cárcel Tenerife I, actualmente un centro de acogida en Santa Cruz de Tenerife, para llevar a cabo una protesta en contra del traslado de una menor que se encuentra en situación de desamparo. El incidente, que tuvo lugar en la tarde del jueves, ha llevado a la Policía Nacional y a la Policía Local a acudir al lugar con el fin de negociar con los manifestantes y tratar de desescalar la situación.
Hasta el momento, no se han registrado detenciones, ni han surgido situaciones de violencia en el centro, aunque las condiciones de vida en este lugar han sido objeto de quejas por parte de algunos de sus ocupantes en ocasiones anteriores. Principalmente, en el centro residen mujeres con niños, lo que añade un nivel de sensibilidad a esta situación ya complicada.
Este acontecimiento se desarrolla en un contexto más amplio, donde las políticas migratorias y las condiciones de vida en los centros de acogida han sido objeto de controversia en las Islas Canarias, que se han convertido en una de las principales puertas de entrada de migrantes a territorio español. La protesta refleja la creciente desesperación y preocupación entre los migrantes por sus condiciones y su futuro.
Las autoridades continúan trabajando para resolver el conflicto de manera pacífica, mientras la tensión se mantiene en el entorno del centro. Se espera que en las próximas horas se proporcionen más detalles sobre el desenlace de este episodio.