En un acontecimiento que captura la atención de millones de aficionados a la música en Europa y más allá, Basilea, la pintoresca ciudad suiza, se prepara para ser la anfitriona de la 69ª edición del Festival de Eurovisión. Este evento, programado para los días 13, 15 y 17 de mayo de 2025, se llevará a cabo en el imponente estadio St. Jakobshalle, reuniendo a competidores de 37 países en lo que promete ser una de las ediciones más emocionantes y variadas en la historia reciente del festival.
Una de las noticias que ha generado mayor expectativa es la participación de España, representada por Melody y su tema «Esa diva». Esta propuesta musical, que se ganó el corazón de muchos tras su victoria en el Benidorm Fest, es particularmente notable por su adaptación al espíritu de Eurovisión, logrando un estilo más internacional y preparando una puesta en escena espectacular. Melody, con su actuación en Benidorm, ha asegurado su posición en la competencia directamente en la final como parte del «Big Five», aunque también deleitará al público en la primera semifinal.
Este año, el festival introduce cambios significativos en su formato y en la manera de interactuar con el contenido digital. Se ha optado por dejar de utilizar los videos de TikTok, marcando un punto de inflexión en el uso de redes sociales para compartir el contenido relacionado con Eurovisión. Asimismo, se han anunciado restricciones para la prensa en los ensayos, buscando mantener la exclusividad y el impacto de las presentaciones hasta su revelación oficial.
El abanico musical en competencia abarca desde el electropop hasta baladas profundas, mostrando un rico tapiz de géneros que reflejan la diversidad cultural del continente europeo y más allá. Se ha dedicado especial atención a la secuencia de las actuaciones para garantizar el dinamismo y la equidad en la visibilidad de los participantes.
Ya se han confirmado los competidores de la primera semifinal, con España actuando inmediatamente después de Estonia. La segunda semifinal también promete ser un evento lleno de emociones, con 16 países compitiendo por un lugar en la gran final y la participación especial de tres miembros del «Big Five» con sus respectivas canciones.
Esta nueva edición de Eurovisión no solo busca continuar con el legado del festival como uno de los eventos musicales más significativos a nivel internacional, sino que también aspira a establecer un nuevo paradigma en cómo se celebra y disfruta este espectáculo. La anticipación es alta tanto en Basilea como en todo el continente y entre los aficionados de todo el mundo, quienes esperan con expectativa el momento en que las luces se enciendan y dé inicio a esta gran fiesta de la música, la diversidad cultural y la unidad.