El vicepresidente primero de Castilla-La Mancha, José Luis Martínez Guijarro, ha destacado el aumento de población que se ha producido en los últimos años en zonas despobladas de la Comunidad Autónoma. Este incremento poblacional se ha vinculado a la aplicación de las medidas de la Ley de Despoblación, aprobada en el año 2021.
Según Martínez Guijarro, en los pueblos afectados por la despoblación se ha registrado un saldo migratorio positivo, con un total de 11.368 personas que han elegido vivir en zonas de extrema, intensa y en riesgo de despoblación en Castilla-La Mancha. Las medidas de la Ley, como la garantía de acceso a servicios públicos, el transporte sensible a la demanda, deducciones fiscales y medidas de discriminación positiva para emprendedores, han convertido a estos pueblos en lugares atractivos para vivir.
Además, el vicepresidente resaltó que no solo se está frenando la pérdida demográfica, sino que se está revirtiendo el fenómeno de la despoblación en la región. En la provincia de Guadalajara, por ejemplo, se ha observado un incremento en la población de los pequeños municipios, con 2.500 personas más en los últimos dos años eligiendo vivir en zonas afectadas por la despoblación.
Martínez Guijarro también destacó la importancia del ocio y la cultura como herramientas para combatir la despoblación. El festival itinerante ‘CLM Living Rural’ ha sido una iniciativa para enriquecer la oferta cultural y turística en cinco comarcas de la región, con actividades como degustaciones gastronómicas, teatro infantil y espectáculos musicales en directo.
En definitiva, el aumento de población en zonas despobladas de Castilla-La Mancha es un resultado positivo de las medidas implementadas por el Gobierno regional para combatir la despoblación y crear entornos más atractivos para vivir en los pueblos.