En una reciente reunión institucional en Toledo, el secretario general de UPA Castilla-La Mancha, Julián Morcillo, se reunió con la directora gerente de la Agencia del Agua de Castilla-La Mancha, Mercedes Echegaray, y otros representantes para abordar la problemática y situación de las distintas cuencas hidrológicas que afectan a la región, así como a los agricultores y regantes.
Uno de los temas principales discutidos fue el Plan Especial del Alto Guadiana, una demanda de la UPA que requiere una respuesta urgente, ya que afecta directamente a los regantes de explotaciones familiares. Es crucial poner en marcha un ente de coordinación entre los gobiernos de España y de Castilla-La Mancha para relanzar este plan estratégico de manera inmediata.
La Agencia del Agua informó sobre las reuniones de las mesas de trabajo para la recuperación del Parque Nacional de las Tablas de Daimiel, así como las gestiones con el MITERD, señalando la intención de ampliar las actuaciones al ámbito del Plan del Alto Guadiana.
Se discutió la importancia de profundizar en los estudios y el conocimiento de los acuíferos de la región, dado que cerca del 80% de los recursos de riego de Castilla-La Mancha son subterráneos. Además, se mencionó el modelo de gestión del agua de la Junta Central de Regantes de la Mancha Oriental como ejemplo a seguir en otras zonas de riego.
Otros temas abordados incluyeron la necesidad de activar las inscripciones de pozos previos a la declaración de sobreexplotación de acuíferos, así como las concesiones pendientes de otorgar por la Confederación Hidrográfica del Tajo en el acuífero Algodor-Sonseca.
En resumen, la reunión se centró en cuestiones de gobernanza del agua relacionadas con las distintas demarcaciones hidrográficas de la región, con la intención de compartir información y buscar soluciones para los problemas presentes en el sector agrícola y de riego en Castilla-La Mancha.