Juan Carlos I, el rey emérito de España, conmemoró su 87º cumpleaños el pasado domingo 5 de enero en Abu Dhabi, donde ha vivido durante casi cinco años. La celebración reunió a una parte significativa de su familia, destacándose la presencia de seis de sus ocho nietos, quienes asistieron acompañados por sus respectivas parejas. Entre las ausencias notables se encontraban la princesa Leonor, que se encuentra actualmente realizando un viaje a bordo del buque-escuela Juan Sebastián Elcano, y la infanta Sofía, quien ha regresado a su internado en Gales tras las navidades.
La celebración, que se extendió durante todo el fin de semana, ofreció una imagen renovada de la familia del rey emérito, resaltando el vínculo familiar. La infanta Elena estuvo acompañada por su hija, Victoria Federica, y su hijo, Froilán. La infanta Cristina también asistió con sus hijos: Juan, Pablo, Miguel e Irene Urdangarin, lo que contribuyó a una atmósfera festiva y unida.
Los eventos organizados para la ocasión fueron variados e impresionantes. Según los informes, la festividad incluyó cenas de gala, un asombroso espectáculo de drones que iluminó el cielo con la bandera de España y la imagen del rey emérito. Además, un homenaje flamenco con música de Paco de Lucía y un espectáculo de magia a cargo del ilusionista británico Drummond Money-Coutts formaron parte de la programación.
Sin embargo, el momento más conmovedor de la celebración llegó con una fotografía familiar que reunió a Juan Carlos I junto a sus hijas, sus nietos y sus parejas. Esta imagen simbolizaba la unidad y el amor que rodean al monarca en esta etapa de su vida. Asimismo, un grupo de alrededor de treinta amigos cercanos asistió a la celebración, demostrando así el aprecio y la admiración que aún suscita el rey emérito entre su círculo más íntimo.