Este viernes, el panorama cinematográfico español recibe una refrescante actualización con varios estrenos que prometen deleitar a los amantes del séptimo arte. Entre las nuevas propuestas destaca un proyecto que marca un hito en la carrera de la aclamada actriz Demi Moore, quien por primera vez incursiona en el género de terror. La película, que busca no solo entretener sino también reflexionar sobre los extremos a los que las personas pueden llegar en su búsqueda de la belleza, ha generado un fuerte impacto a nivel global gracias a su contenido explícitamente gore, lo que la perfila como una de las favoritas para ser considerada la mejor cinta de horror del año.
En «La sustancia», Moore interpreta a Elisabeth Sparkle, una renombrada presentadora de un programa de gimnasia televisivo quien se encuentra al borde del despido por considerarse que ha envejecido, buscando reemplazarla por una figura más joven que atraiga al público. Ante la desesperación, Elisabeth descubre un anuncio de una sustancia mágica que promete rejuvenecimiento en menos de 24 horas. Tras conseguirla y aplicársela, Elisabeth experimenta una transformación física drástica, dando paso a una versión más joven de sí misma, interpretada por Margaret Qualley. Esta nueva encarnación, Sue, que debe intercambiar cuerpos con Elisabeth semanalmente y alimentar el cuerpo inerte de la presentadora, buscará alcanzar la fama a cualquier costo.
El filme, que ha logrado convertirse en un fenómeno viral por su profunda carga social y sus intensas secuencias, nació de las reflexiones de su directora, Coralie Fargeat, sobre el proceso de envejecer, especialmente al acercarse a los cincuenta años. Fargeat compartió que estos pensamientos le provocaron una serie de reflexiones sobre el miedo al olvido y la obsesión por la juventud, temas que son explorados de manera gráfica y visceral en la película, al punto de provocar náuseas en algunos espectadores debido a su crudeza.
«La sustancia» no solo promete ser un éxito de taquilla debido a su innovadora trama y las poderosas actuaciones de Moore y Qualley, sino que también se perfila como una pieza de reflexión crítica sobre la sociedad actual y sus estándares de belleza y juventud. Con su llegada a las salas de cine españolas, seis meses después de su estreno en Estados Unidos, este estreno se posiciona como una cita obligada para los aficionados al género de terror y aquellos interesados en las dinámicas sociales contemporáneas.
