El equipo de Iker Jiménez, reconocido periodista y presentador del programa Horizonte, se ha visto recientemente en medio de una controversia tras los informes transmitidos desde la Comunidad Valenciana, lugar afectado por las consecuencias de una DANA devastadora. En específico, la atención se centró en el relato entregado por Carmen Porter, co-presentadora, sobre el estado caótico del parking subterráneo del centro comercial Bonaire, en el cual se sugirió un escenario dantesco, amplificado luego por Jiménez en sus redes sociales con insinuaciones de un número no especificado de víctimas mortales que, según ellos, podría haber sido ocultado o manipulado por las autoridades.

Con el paso del tiempo, una investigación exhaustiva llevada a cabo por equipos especializados del Consorcio de Bomberos, la Policía Nacional y la Unidad Militar de Emergencias (UME) desmintió tales afirmaciones, confirmando que no había víctimas mortales en el lugar. Esta actualización rebatió la información alarmante y no verificada previamente difundida por el equipo de Horizonte.

La respuesta de Jiménez al esclarecimiento de los hechos no se hizo esperar, mostrando su alivio en las redes sociales por no haberse confirmado las peores hipótesis inicialmente reportadas. No obstante, esta rectificación no mitigó la ola de críticas hacia el programa por parte del público y usuarios de redes sociales, quienes reprocharon la falta de precisión, el sensacionalismo y la premura por obtener exclusivas sin la debida verificación, lo cual va en detrimento de la responsabilidad periodística.

Este suceso no solo ha generado un amplio debate sobre las éticas de la comunicación en situaciones de crisis, sino que también ha puesto en evidencia la delgada línea que separa el interés público de la espectacularidad en el mundo de los medios. A pesar del revuelo y las críticas, Horizonte logró un incremento significativo en su audiencia durante la emisión especial dedicada a la DANA, evidenciando la compleja relación entre el contenido mediático y las expectativas del público.

Este episodio subraya una vez más la importancia de la verificación rigurosa de las fuentes por parte de los medios de comunicación antes de proceder a su divulgación, en especial cuando se trata de informaciones que pueden generar alarma o preocupación en la comunidad. La responsabilidad de informar con precisión es fundamental para mantener la confianza del público y garantizar que la comunicación durante las crisis sea efectiva y veraz.