En un giro inesperado, el Rey Felipe VI ha decidido no asistir a la tradicional corrida de la Beneficencia, parte central de la feria de San Isidro en Madrid, optando por un cambio de representación en este evento tan significativo. Este año, la responsabilidad de representar a la monarquía española caerá en manos de su hermana, la Infanta Elena, quien estará presente en la plaza de toros de Las Ventas el próximo 9 de junio.
Aunque la Infanta Elena no forma parte de la Familia Real de manera formal, su conocida afición por la tauromaquia y su participación ocasional en eventos representando a la Corona, por petición de su hermano el Rey Felipe VI, hacen de su asistencia un acto de continuidad en el apoyo mostrado por la familia real hacia esta tradición española. Cabe destacar que el Rey Felipe VI cumplirá con la tradición de presidir la corrida de la Prensa el día 5 de junio, marcando su compromiso con otros elementos importantes de la feria.
Además, la agenda de compromisos de la Infanta Elena incluye la participación en la entrega de premios del 33º concurso de Pintura Infantil y Juvenil para Centros Escolares en Madrid el 6 de junio, lo que refleja su activa participación en actos oficiales y su papel en representación de la monarquía.
Este distanciamiento del Rey Felipe VI respecto a la corrida de la Beneficencia, sin alejarse completamente de las festividades relacionadas con la tauromaquia, refleja un sutíl balance entre la tradición y la modernidad. La Casa Real, históricamente, ha expresado su apoyo a la tauromaquia, considerando la práctica como un componente cultural importante de España, algo que personajes como Rafael García Garrido, figuras reconocidas dentro de la tauromaquia, valoran profundamente.
La presencia y la participación activa de miembros de la monarquía en eventos taurinos, ya sea saludando a los participantes o asistiendo en papel oficial como lo hará la Infanta Elena, subrayan la cercanía entre la monarquía y esta tradición. Aunque la ausencia del Rey en la corrida de la Beneficencia de este año pueda percibirse como un cambio, la continuidad de la Casa Real en apoyar tales eventos se mantiene firme con la representación de otros miembros en actos significantes.
