La temporada de melón y sandía en la región de La Mancha en Ciudad Real está siendo desafiante debido a las recientes lluvias y tormentas, lo que ha provocado calibres más pequeños en los productos. A pesar de esto, los productores tienen buenas perspectivas para la temporada.
Según el agricultor Mario Picazo de Melones y Sandías Los Picazos, si las altas temperaturas se mantienen, se espera una temporada exitosa. Además, el aumento en el consumo también contribuye a estas expectativas positivas. Se espera que los precios sean «correctos» y que la calidad, como siempre en La Mancha, sea extraordinaria.
Aunque la cantidad de producto ha disminuido debido a los calibres más pequeños, se espera que a principios de agosto los supermercados vuelvan a tener disponibles los calibres tradicionales, que rondan de 1,5 a 2 kilos, e incluso se espera que se consoliden piezas de hasta 4 kilos.
En términos de exportación, que es más común en el mercado de la sandía, se espera que alcance niveles «importantes» si las temperaturas se mantienen estables en Europa central.
Las altas temperaturas de este verano están beneficiando a los agricultores al aumentar la productividad. Mario Picazo destaca que «el sol es el que más melones compra», pero advierte que las lluvias durante el verano pueden causar problemas como la aparición de hongos en las raíces.
En resumen, a pesar de los calibres más pequeños debido a las recientes lluvias, los productores de melón y sandía en La Mancha tienen buenas expectativas para la temporada. Se espera que la calidad sea alta y los precios competitivos tanto en el mercado nacional como en la exportación.