La estética «cottagecore», que celebra la vida rural y la nostalgia, está ganando terreno en el ámbito del diseño de interiores gracias a la nueva colección de ropa de cama y baño de Pip Studio. Esta marca es reconocida por su estilo vibrante y distintivo, y su reciente línea busca convertir los hogares en refugios acogedores con un toque de encanto vintage.

Los productos de Pip Studio se caracterizan por sus patrones florales y una paleta de colores suaves, que evocan la tranquilidad del campo. La ropa de cama, que incluye edredones, sábanas y fundas de almohada, no solo proporciona confort, sino que también actúa como un elemento decorativo que transforma cualquier habitación. Las combinaciones de estampados crean una armonía visual que recuerda momentos serenos, ideales para un descanso reparador.

En el ámbito del baño, la colección se compone de toallas y albornoces que son tan suaves como atractivos. Estos textiles añaden un toque fresco y acogedor al espacio, convirtiendo el baño en un santuario de relax. Con una variedad de tonos pastel y estampados florales vibrantes, cada pieza invita a sumergirse en un ambiente de paz y estilo.

Incorporar estos elementos en el hogar permite disfrutar de la esencia del estilo «cottagecore» sin necesidad de alejarse de la ciudad. La combinación de confort, funcionalidad y estética vintage que ofrece Pip Studio hace que esta colección sea una elección ideal para aquellos que buscan un rincón de serenidad. En un mundo cada vez más acelerado, redescubrir la calidez y el encanto de lo vintage se convierte en una necesidad para encontrar un momento de conexión con lo simple y lo natural.