Julian Amores, presidente del club Caserío Ciudad Real, ha expresado su profunda emoción por el esperado regreso del equipo a la Liga Asobal. Este retorno, según Amores, es el resultado del inquebrantable apoyo y cariño que han recibido de los aficionados y de toda la provincia. La participación activa de la comunidad en el desarrollo del deporte local ha sido fundamental para alcanzar este hito.
Un reflejo palpable del fervor de los seguidores se observa en el creciente interés de los más jóvenes por el club. Amores ha compartido que muchos niños han solicitado la camiseta del Caserío para celebrar la noche mágica de los Reyes, lo que pone de manifiesto no solo la pasión por el equipo, sino también la conexión especial que se ha forjado entre la afición y la institución.
El presidente también ha puesto énfasis en la importancia de que la base del club tenga la oportunidad de llegar a los primeros equipos y competir en la élite. Este objetivo es crucial para el Caserío Ciudad Real, y Amores subraya que el trabajo en equipo y la formación continua de los jugadores son elementos clave para alcanzar el éxito en la competición.
El entusiasmo por el regreso a la Liga Asobal no solo es un logro deportivo, sino también un símbolo de unidad y orgullo para la comunidad, que se ha volcado completamente en apoyo del equipo. La historia del Caserío continúa escribiéndose, y con el respaldo fervoroso de sus seguidores, el camino hacia nuevas victorias se vislumbra lleno de esperanza.

