La noche de la gran final de MasterChef 12 estuvo llena de emociones, sabor y giros inesperados, celebrando el arte culinario en su máximo esplendor. Cuatro aspirantes, Samya, María, Ángela y Gonzalo, se enfrentaron en la culminación de una competencia que testeó sus habilidades, creatividad y pasión por la cocina. Bajo la atenta mirada de Jesús Sánchez, chef acreedor de tres soles Repsol, los concursantes se sumergieron en el desafío de replicar dos de sus más intrincadas creaciones con influencias mediterráneas.
María y Ángela mostraron destrezas excepcionales, capturando la esencia y el sabor de los platos del chef Sánchez, lo que les valió el primer y segundo lugar respectivamente. Por otro lado, Gonzalo, conocido por su fuerte presencia en la competición, decidió dar un paso audaz dando un giro personal a las elaboraciones, una estrategia que, desafortunadamente, no resonó con las expectativas del jurado debido a diferencias en sabor y presentación, relegándolo al cuarto lugar.
La noche también vio un giro dramático con la descalificación de Samya, tras un incidente en la cocina, lo que intensificó el clímax de la competición, dejando a Ángela y María en un emocionante duelo por el primer lugar. Este acontecimiento no solo captó la atención de la audiencia en la sala, sino que también se convirtió en un tema de conversación en las redes sociales, donde los espectadores compartieron mensajes de apoyo y solidaridad, especialmente hacia Gonzalo, cuya determinación fue vista con respeto pese a los resultados.
Al final de la velada, María fue coronada como la ganadora de MasterChef 2024, una victoria bien merecida que concluyó una noche repleta de emoción y talento excepcional. Ángela y Gonzalo, aunque no alcanzaron el máximo galardón, se destacaron como ejemplares de perseverancia y dedicación a su arte, inspirando a muchos con su camino en la competencia.
MasterChef 12 se recordará por sus momentos imprevistos y enfatizará la importancia de la precisión, la paciencia y la creatividad en la cocina. Entre lágrimas, risas y platos que cautivaron a jueces y espectadores por igual, el programa cierra su edición, dejando tras de sí inspiración y prometiendo regresar con nuevas historias de aspirantes dispuestos a alcanzar sus sueños culinarios.