El alcalde de Ciudad Real responde a Vox tras la ruptura del pacto de gobierno
El alcalde de Ciudad Real, Francisco Cañizares, ha contestado este miércoles a las acusaciones formuladas por Vox tras la reciente ruptura del pacto de gobierno en el Ayuntamiento. Cañizares enfatizó que «ellos sabrán si quieren trabajar en mejorar la ciudad o volver a equivocarse», en referencia a las declaraciones de Vox, que había manifestado su intención de «hiperventilar» al Partido Popular (PP) después de esta separación.
En medio de esta situación, el alcalde defendió que su prioridad es «la política útil» que promueva el progreso de Ciudad Real y el bienestar de sus ciudadanos, haciendo hincapié en su disconformidad con aquellos que buscan «generar problemas donde no los hay». Cañizares criticó, además, la actitud del diputado nacional de Vox, Ricardo Chamorro, a quien acusó de anteponer su posición en Madrid a la estabilidad del municipio. «Está más preocupado por mantenerse como diputado que de trabajar por su ciudad», añadió, argumentando que Vox ha estado «enredando» y obstaculizando iniciativas desde su posición en la oposición.
El alcalde recordó que el rechazo de Vox a una subvención de 20 millones de euros para la ciudad fue el detonante que llevó a la conclusión de que su permanencia en el gobierno no era sostenible. De cara al futuro del Partido Popular en el Ayuntamiento, Cañizares dejó claro que su equipo continuará con su modelo de gestión, asegurando que implementarán medidas que pueden no ser del agrado de todos, pero seguirán adelante independientemente del apoyo de Vox.
Durante una rueda de prensa en la que estuvo acompañado por el presidente del PP de Castilla-La Mancha, Paco Núñez, Cañizares agradeció el respaldo del líder regional ante las decisiones adoptadas en el Ayuntamiento. Núñez defendió la decisión del alcalde de romper el pacto con Vox, considerándola una respuesta necesaria a «los chantajes» de la formación liderada por Santiago Abascal.
Esta ruptura en el pacto de gobierno se plantea como un punto de inflexión en la política local de Ciudad Real, donde las decisiones tomadas por Cañizares buscarán priorizar el bienestar ciudadano frente a presiones externas.
