En recientes declaraciones, Donald Trump, candidato a la presidencia por el partido republicano, planteó la posibilidad de descontinuar el crédito fiscal de $7,500 destinado a la compra de vehículos eléctricos en Estados Unidos. Trump, quien ha expresado previamente escepticismo sobre los beneficios de los incentivos y créditos fiscales, no descartó completamente esta ayuda, pero cuestionó su efectividad y sugirió un enfoque de mercado más diversificado que incluya coches a gasolina, híbridos y tecnologías emergentes.
Además, Trump valoró la posibilidad de incorporar a Elon Musk, CEO de Tesla, en su gabinete, elogiando su “inteligencia y capacidades” para posiblemente asesorar en temas relacionados con la industria automotriz o en otras áreas de innovación y tecnología.
Trump también abordó la cuestión de las tarifas comerciales y su impacto en la industria automotriz. Manifestó su interés de aplicar nuevos aranceles a los vehículos producidos en México por las principales automotrices estadounidenses para incentivar la relocalización de la producción en Estados Unidos. Contrario a esto, se mostró abierto a permitir a fabricantes chinos y de otros países establecer operaciones en suelo estadounidense, enfocándose en estimular la creación de empleos locales y fortalecer la producción nacional.
El expresidente extendió sus críticas hacia Google, refiriéndose a la compañía en términos poco favorables y comentando sobre un reciente fallo judicial que la califica de monopolio ilegal, aunque no específico su postura sobre acciones específicas contra la empresa.
En otro orden, a pesar de las crecientes preocupaciones sobre TikTok y su vinculación con la empresa matriz china ByteDance, Trump señaló la complejidad de abordar la problemática de la plataforma dentro del marco actual de libertad de expresión en Estados Unidos. Destacó la favorable cobertura que ha recibido en TikTok, aunque reconoció los desafíos legislativos para enfrentar potenciales medidas regulatorias o de prohibición.
Estas declaraciones ofrecen un vistazo a las posiciones y propuestas de Trump en temas de política económica, tecnológica y de seguridad nacional, mostrando un enfoque crítico hacia los acuerdos comerciales actuales y la influencia de grandes corporaciones tecnológicas en el mercado y la sociedad.