Esta mañana, el municipio de Deba ha dado un paso significativo en la mejora de la salud pública al integrarse al Programa de mejora del uso de medicamentos. Este movimiento estratégico fue formalizado mediante un acuerdo firmado por Jon Iñaki Betolaza, director de Farmacia del Gobierno Vasco; Alazne Txurruka, alcaldesa de Deba; y Miguel Ángel Gastelurrutia, presidente del Colegio Oficial de Farmacéuticos de Gipuzkoa. Deba se suma así a un total de 47 municipios en Gipuzkoa que ya están implementando esta iniciativa, diseñada para asegurar un acceso apropiado a la medicación y mejorar la adherencia a los tratamientos, especialmente entre los usuarios del Servicio de Ayuda Domiciliaria y los Servicios Sociales.
El programa se centra en educar a la población sobre la correcta utilización de sus medicamentos y en garantizar que sigan las pautas de tratamiento establecidas por profesionales médicos. En Gipuzkoa, alrededor de 580 personas ya se benefician de esta iniciativa, que se apoya en la cooperación activa de 277 farmacias acreditadas.
Para el próximo año, Gipuzkoa destinará 160.000 euros al programa, mientras que a nivel de Euskadi, se suman 149 municipios con un total de 734 farmacias acreditadas, beneficiando a más de 1.645 usuarios del servicio. Para 2025, se ha proyectado un presupuesto de 500.000 euros, asegurando la continuidad y expansión del programa.
El proceso inicia con la selección de los participantes por parte de la dirección de Servicios Sociales de cada ayuntamiento. Los usuarios dan su consentimiento y eligen la farmacia que les prestará apoyo. Posteriormente, se elabora una ficha personalizada para cada participante, especificando su medicación y problemas de salud. Los farmacéuticos preparan y entregan la medicación de manera organizada, ya sea de forma quincenal o semanal, adaptándola a las necesidades individuales.
Un componente fundamental de este proceso son los sistemas personalizados de dosificación (SPD), que facilitan a los pacientes la identificación de los medicamentos que deben tomar en cada momento del día, acompañados de la información necesaria para su correcta administración.
El programa se propone no solo mejorar la adherencia al tratamiento y prevenir problemas derivados del uso incorrecto de medicamentos, sino también capacitar al personal auxiliar domiciliario y a los cuidadores, asegurando así una atención integral a quienes más lo necesitan. Este enfoque integral no solo optimiza los resultados del tratamiento médico, sino que también promueve una mejor calidad de vida para los usuarios del servicio.