La conectividad digital en España sigue avanzando a pasos firmes, y Castilla-La Mancha es un claro reflejo de esta tendencia. Un reciente informe del Panel de Hogares revela que el 64% de los usuarios de banda ancha móvil en el país se siente satisfecho con la velocidad y cobertura de su conexión. No obstante, persisten problemas de cobertura, especialmente en áreas rurales y menos pobladas, donde los desafíos son aún mayores.
La banda ancha fija ha experimentado un considerable crecimiento, con el 88,7% de los hogares españoles ya conectados, lo que representa un aumento de 16 puntos porcentuales desde 2015. Este avance en las infraestructuras de telecomunicaciones beneficia tanto a grandes urbes como a localidades más pequeñas, permitiendo un desarrollo económico y social más equitativo en regiones como Castilla-La Mancha. Sin embargo, la telefonía fija ha perdido relevancia, ya que casi la mitad de los hogares del país no ha hecho uso de este servicio en el periodo analizado.
En términos económicos, los hogares que han optado por paquetes convergentes, que integran Internet, telefonía y televisión de pago, han registrado un gasto medio mensual que ha alcanzado los 80,3 euros, un récord desde 2022. Por otro lado, los paquetes que no incluyen televisión son más económicos, con un gasto medio de 42,1 euros, el más bajo en casi diez años. Esto indica que, aunque la televisión de pago sigue siendo un servicio importante, los consumidores buscan cada vez más ofertas que se ajusten a sus necesidades específicas.
A pesar de la satisfacción general con la banda ancha móvil, es preocupante que cerca de siete de cada diez usuarios hayan reportado problemas de cobertura en los últimos seis meses, particularmente en el uso de redes sociales y plataformas de vídeo. Sin embargo, solo el 8,5% de los usuarios experimenta estos problemas de manera frecuente, lo que sugiere que, a pesar de los inconvenientes, han habido mejoras significativas en la calidad del servicio.
La transformación en los hábitos de comunicación de la población también es notable. Un 70% de los españoles envía mensajes de forma frecuente a través de aplicaciones de mensajería instantánea, mientras que el uso del SMS ha disminuido drásticamente. Casi la mitad de los hogares no utiliza el teléfono fijo, lo que resalta la creciente dependencia de los teléfonos móviles y las plataformas digitales.
A medida que Castilla-La Mancha avanza hacia un futuro más conectado, la expansión de la banda ancha fija y móvil, junto con el desarrollo de redes 5G, promete disminuir la brecha digital y facilitar nuevas oportunidades para ciudadanos y empresas. Aunque el progreso es evidente, aún queda trabajo por hacer para asegurar que la cobertura sea completa y de calidad en todos los rincones de la región.