En la era actual, donde la sostenibilidad y la innovación son cada vez más apreciadas, una nueva tendencia en la decoración del hogar está emergiendo con fuerza. Se trata de la creación de ambientadores utilizando objetos reciclados, como botes de encurtidos y rollos de papel higiénico, para lograr espacios más ecológicos y personalizados.
Este movimiento DIY ha capturado la atención de muchos apasionados por la decoración, quienes encuentran en esta práctica una forma sencilla y económica de darle un toque personal a sus hogares. El procedimiento es bastante simple y solo requiere creatividad y materiales básicos: se comienza limpiando a fondo el bote de encurtidos y eligiendo un aroma, como lavanda o cítricos, para infundir en el espacio.
Luego, el rollo de papel higiénico se corta en tiras, que pueden ser envueltas o colocadas dentro del bote. Estos fragmentos se empapan en aceites esenciales o en una mezcla de agua con fragancia, asegurando una buena absorción. Finalmente, las tiras se colocan en el bote, que luego se cierra con una tapa decorativa o tela, permitiendo que el aroma se difunda suavemente.
El resultado es un ambientador natural, estéticamente adaptable a cualquier estilo de decoración y perfecto para cualquier rincón del hogar, desde el baño hasta la sala de estar. Además de aportar frescura y comodidad al ambiente, esta práctica fomenta el reciclaje y el aprovechamiento de recursos que de otro modo serían desechados.
La difusión de esta tendencia se ha visto impulsada por plataformas en línea, donde las personas comparten sus creaciones y tutoriales, promoviendo así un movimiento comunitario por la sostenibilidad. Esta no es solo una forma de embellecer el hogar, sino también de demostrar una conciencia ecológica y creatividad.
Transformando simples botes de encurtidos y rollos de papel en elementos decorativos clave, esta tendencia no solo cuida del planeta, sino que también ofrece a cada persona la oportunidad de reflejar su personalidad y estilo en la decoración de su hogar.