En la última década, la escena artística española ha presenciado el ascenso notorio de actrices y actores que han sabido cautivar al público con talento, dedicación y una notable capacidad de adaptación a diversos géneros y formatos. Entre estos nombres resplandece el de Andrea del Río, cuya trayectoria multifacética en cine, teatro y televisión la ha erigido como una de las figuras más prominentes del panorama nacional.
Originaria de Zaragoza, Andrea del Río se embarcó en el viaje de la actuación hace más de quince años, forjando desde entonces una carrera que destaca por su riqueza y versatilidad. Es quizás su papel como Teresa Villamil en la aclamada serie de La 1, «La Promesa», lo que más ha resonado con el público y la crítica en los últimos tiempos. Este rol, que la posiciona en el centro de un intenso drama de época, ha servido para reafirmar su habilidad para sumergirse plenamente en cada personaje que interpreta.
La formación de Del Río, que comenzó en las aulas de escuelas teatrales de Zaragoza y se enriqueció bajo la tutela del renombrado Juan Codina, ha jugado un papel fundamental en su desarrollo actoral. Esta sólida base educativa le ha permitido abordar con éxito roles en producciones de gran envergadura como «Gran Hotel» y «Amar es para siempre», además de emprender incursiones en el cine y el teatro que han sido bien recibidas tanto por el público como por los especialistas.
Las pantallas grandes y pequeñas han podido disfrutar de la presencia de Del Río en cortometrajes como «Levedad» y «Palomitas», y en largometrajes que incluyen «Licantropía». En el teatro, su flexibilidad y rica expresividad se han visto en obras dirigidas por Marc Clotet, así como en piezas de microteatro, donde ha brillado especialmente, demostrando un compromiso y una entrega a su oficio que no pasa desapercibido.
Desde sus primeras apariciones en televisión con papeles secundarios en «Gran Hotel» y «El secreto de Puente Viejo», hasta un notable punto de inflexión con su trabajo como Pilar Salinas en «Mar de plástico», Andrea del Río ha ido escalando posi
ciones hasta convertirse en un referente de la interpretación en España. Como la inspectora Alicia Ocaña en «Servir y proteger», y más recientemente con «La Promesa», Andrea ha demostrado una y otra vez que su capacidad para capturar la esencia de los personajes y conectar con el público es excepcional.
La evolución de Andrea del Río en el mundo de la actuación es un testimonio de su pasión inagotable, de su constante búsqueda de crecimiento profesional y de una dedicación que trasciende el escenario. Con cada proyecto, Andrea no solo consolida su lugar como actriz destacada, sino que también sigue inspirando a una nueva generación de actores y aficionados al arte dramático por igual. Su camino, un viaje de evolución y reconocimiento, es un claro ejemplo de cómo la determinación y el amor por el arte pueden abrir puertas a mundos inimaginables.