La Junta de Andalucía ha puesto en marcha la fase de preemergencia del Plan de Emergencia ante el Riesgo de Inundaciones, debido a las intensas lluvias pronosticadas para mañana en Málaga y Granada. Las proyecciones meteorológicas indican que en algunas áreas de Málaga podrían acumularse hasta 120 mm de lluvia, lo cual representa un riesgo considerable de inundaciones. Las autoridades han enfatizado la necesidad de mantener la precaución y evitar desplazamientos innecesarios en las zonas afectadas.
Las precipitaciones comenzarán desde las primeras horas de la mañana y se prevé que sean continuas e intensas durante el día, lo que podría generar riesgos en carreteras y otras áreas vulnerables a inundaciones. Los avisos meteorológicos emitidos en ambas provincias son de nivel naranja y amarillo, lo que pone de relieve la relevancia de la situación para la seguridad de las personas y sus pertenencias.
Frente a este panorama, Protección Civil, junto con la Junta de Andalucía, ha instado a la población a ser cautelosa al trasladarse y a eludir actividades en lugares propensos a inundaciones, tales como cercanías de ríos o terrenos bajos. Es esencial que los ciudadanos se mantengan informados a través de fuentes oficiales y sigan las instrucciones de las autoridades locales, ya que las lluvias intensas aumentan el riesgo de deslizamientos de tierra y desbordamientos de cauces. Además, se recomienda no estacionar vehículos en áreas susceptibles a inundaciones y tomar medidas para proteger aquellos que puedan sufrir daños.
La Agencia Estatal de Meteorología ha advertido que las lluvias intensas en Málaga podrían extenderse a Granada y otras regiones andaluzas. Por lo tanto, se aconseja a los residentes de estas provincias que se mantengan alerta a las actualizaciones meteorológicas, dado que las condiciones pueden variar rápidamente. Las lluvias pronosticadas tienen un potencial significativo para impactar la movilidad y los servicios públicos en la región.
Ante estos avisos, los servicios de emergencia han colaborado estrechamente con la Junta para anticipar posibles incidentes y ofrecer una respuesta rápida en caso de cualquier emergencia. La activación de la fase de preemergencia permite la movilización de recursos preventivos, asegurando la protección de la ciudadanía mientras se espera mantener la situación bajo control.