En 2020, Maria Grazia Crosato, ex bailarina y pedagoga de danza clásica, estableció Mara Dancewear, una marca que rápidamente se ha convertido en un referente internacional en el ámbito del ballet. Con tan solo 28 años, Maria Grazia ha transformado la forma en que las bailarinas experimentan su arte, ofreciendo prendas que se sienten como una segunda piel, destacando por su diseño, comodidad y producción artesanal.
La creación de Mara Dancewear nace de una experiencia profundamente personal. Desde pequeña, Maria Grazia estuvo inmersa en el mundo del ballet gracias a su madre, quien dirigía una escuela de danza. Sin embargo, durante su adolescencia, enfrentó inseguridades derivadas de los cambios físicos. Esta vivencia la motivó a confeccionar una línea de ropa que proporcionara confianza y empoderamiento a otras bailarinas. Con la pandemia como trasfondo, Maria materializó su sueño con unos pocos metros de tela y el apoyo incondicional de su pareja, Mauricio, lanzando su tienda online.
Desde su origen, la firma ha vestido a bailarinas de todos los niveles, abarcando desde estudiantes hasta profesionales de compañías tan prestigiosas como el Royal Ballet de Londres, el New York City Ballet y el American Ballet Theatre. Además, ha mantenido vínculos con el talento local, colaborando con la Compañía Nacional de Danza de España en sus campañas. Actualmente, Mara Dancewear tiene ventas en más de 50 países y está presente en 49 tiendas especializadas de 24 naciones.
El pilar de Mara Dancewear es su compromiso con la excelencia. Sus colecciones, que incluyen maillots, faldas y pantalones de calentamiento, son confeccionadas a mano con tejidos de alta calidad certificados con OEKO-TEX®, asegurando productos seguros y sostenibles. El maillot Aura, una de sus piezas más destacadas, ha alcanzado fama internacional por su versatilidad y confort.
Mara Dancewear sigue avanzando con la misión de satisfacer las necesidades de la comunidad de danza, ofreciendo prendas que fusionan la pasión por el ballet con una atención meticulosa al detalle y a la calidad artesanal. Con la vista puesta en el futuro, la firma se prepara para seguir inspirando y vistiendo los sueños de bailarinas alrededor del mundo.