La emoción invadió Pamplona en la mañana del 6 de julio, al sonar el chupinazo que dio inicio a los Sanfermines 2025. Desde el balcón de la Casa Consistorial, miles de pañuelos rojos ondearon al unísono, creando un espectáculo vibrante. Sin embargo, este año, la festividad se vio marcada por un mensaje de solidaridad hacia Palestina, que resonó en plena celebración.
Tres representantes de Yala Nafarroa con Palestina, elegidos por votación popular, tuvieron el honor de encender el cohete. Lidón Soriano, Dyna Kharrat y Eduardo Ibero se dirigieron a la multitud, combinando saludos tradicionales con un clamor por la libertad de Palestina, que conmocionó a los presentes. En momentos previos a la explosión del cohete, Soriano pronunció un mensaje que escapaba de las normas del evento: «Free Palestine», seguido por un emocionante «¡Viva Palestina libre!».
Las calles de la ciudad, vestidas de blanco y rojo, se convirtieron en un punto de encuentro entre la celebración y la reivindicación. A pesar de las restricciones que prohíben mensajes ajenos al evento en la Plaza Consistorial, banderas palestinas ondeaban en medio de las risas y los cánticos. Desde el interior del edificio, el alcalde y diversas figuras políticas observaban, mientras el ambiente festivo colmaba la plaza de alegría y de reflexiones sobre la realidad social.
La temperatura superaba los 20 grados, contribuyendo a un ambiente de euforia que mezclaba el ardor del sol con las pasiones humanas. Así, Pamplona se manifestaba como un verdadero crisol de emociones, donde la fiesta se enredaba con la denuncia.
El inicio de las festividades promete 204 horas de actividades ininterrumpidas, culminando el 14 de julio. Este lunes 7, se celebrará el Día Grande con la tradicional procesión y los encierros de toros de Fuente Ymbro. La música también será protagonista, con una variada programación que incluye desde el folk vasco hasta el rap.
Además, el Concurso Internacional de Fuegos Artificiales de Autor celebrará este año una notable participación femenina, con figuras destacadas entre los concursantes. La ciudad se iluminará de forma excepcional con las presentaciones de pirotécnicas de diversas localidades.
Los Sanfermines siempre han sido más que una simple fiesta; son un reflejo de la realidad social, donde las risas y la diversión coexisten con inquietudes y reflexiones profundas. En medio de conciertos y encierros, Pamplona demuestra que la festividad es un espacio de vida y conexión. Y a medida que se acerca el final de la celebración, el eco del «Pobre de mí» se siente en el aire, recordando la esencia misma de la existencia y la comunidad.