Ingrid García-Jonsson se embarca en una nueva aventura actoral con su más reciente papel de Rafaela, una adolescente que se sumerge en un viaje lleno de situaciones extravagantes junto a sus inseparables amigas, en la esperada comedia que promete ser un collage de humor y absurdos encantadores. Este papel, según la actriz sueca, es el más desafiante y peculiar de su carrera, describiéndolo como una experiencia cercana a un sueño psicodélico que solo ha incrementado su entusiasmo por el proyecto.
La serie no se queda corta en cuanto a talento, reuniendo en su reparto a reconocidos nombres del humor español como Carlos Areces, Joaquín Reyes y Arturo Valls, quienes, junto a talentos como Carmen Ruiz, Pepa Cortijo y Luis Callejo, aseguran una dosis continua de carcajadas. Además, la producción cuenta con participaciones especiales de figuras como Esty Quesada, Gakian y el grupo Hidrogenesse, incrementando aún más el atractivo del show.
Uno de los grandes aciertos de la serie es su capacidad de aglutinar generaciones de comediantes de España, desde los más consagrados hasta las promesas actuales, creando un espacio de humor intergeneracional. En este variopinto grupo, Carlos Areces, interpretando al extravagante padre de Rafaela, promete escenas memorables con un personaje que mezcla la icónica figura del Doc Brown con un toque de locura animada, asegurando ser el foco de situaciones tan hilarantes como imprevisibles.
Joaquín Reyes, en el papel de un vecino con teorías conspirativas, encontró una química especial con García-Jonsson que ha permitido explorar y expandir su personaje. Mientras tanto, Arturo Valls sorprende con un giro a su acostumbrada faceta cómica, asumiendo el rol de adversario con el objetivo de interrumpir las aventuras de la protagonista.
La dirección de la serie se ha mostrado entusiasmada con el desarrollo de los personajes secundarios y el excelente funcionamiento del equipo actoral, anticipando que el resultado final será tan impredecible como fascinante. Este nuevo proyecto se perfila no solo como un punto alto en la carrera de Ingrid García-Jonsson, sino como una prometedora adición al panorama de comedias, que busca conquistar un público amplio con su mezcla única de humor, extravagancia y un toque de locura.
