Amor Romeira ha generado revuelo en el mundo del entretenimiento al arrojar luz sobre las tensiones que rodean la reciente ruptura entre Jessica Bueno y Luitingo. El pasado 23 de febrero, Romeira fue la primera en dar la noticia de la separación, un hecho que dejó visiblemente molesto al artista andaluz, quien descalificó los comentarios de la colaboradora tildándolos de “inciertos”. Sin embargo, lo que parecía ser una simple discrepancia ha escalado rápidamente, con Romeira lanzando una advertencia directa hacia Luitingo en el programa «Fiesta», donde promete revelar imágenes que podrían comprometer gravemente al cantante.
Durante su aparición en el programa de Telecinco, la colaboradora no se contuvo y criticó la forma en la que Luitingo se ha expresado sobre ella en sus redes sociales. Argumentó que ha sido víctima de descalificaciones por parte del artista, quien intentó proyectar una imagen de tristeza tras su separación. Según Romeira, al mismo tiempo que el cantante mostraba una fachada melancólica en redes, disfrutaba de una fiesta el mismo día en que se hizo pública la ruptura.
Romeira ha expresado su indignación por haber sido ridiculizada por Luitingo, y ha aclarado que simplemente intentaba contrastar la información que circulaba en medios de comunicación. Además, advirtió que el cantante ha creado una narrativa falsa de ser una víctima, mientras oculta su verdadera realidad.
Asimismo, la colaboradora ha revelado detalles sobre las causas del distanciamiento entre Jessica Bueno y Luitingo. Ha señalado que lo que realmente molestó al cantante fue que ella confirmara públicamente la separación antes que la pareja, algo que él quería mantener oculto. Este hecho, unido a su frustración por la tristeza manifestada por Bueno, generó una reacción desmedida en Luitingo, preocupado por cómo se percibía su rol en la relación.
El cambio de residencia de Luitingo, quien se mudó de Bilbao a Sevilla, también ha jugado un papel crucial en el deterioro de su relación. Según Romeira, esta mudanza le dejó sin amigos cercanos y con un círculo social más amplio en Sevilla. A esto se suman las mentiras que Luitingo supuestamente dijo a Bueno sobre sus actividades, haciendo pasar fiestas prolongadas con amigos por encuentros familiares, lo cual habría contribuido significativamente a la descomposición de la pareja.
En resumen, la situación se complica aún más mientras Romeira se posiciona como la voz que destapa las contradicciones del cantante, revelando un conflicto que va más allá de una simple ruptura, adentrándose en una narrativa de engaños y apariencias.