En un reciente episodio del programa de telerrealidad «Gran Hermano», emitido en directo, la madre de uno de los finalistas, Cristina, ha manifestado nuevamente su descontento con el trato que recibe su hijo, Juan, por parte de la organización del show. Cristina sostiene que Juan enfrenta una desventaja durante el debate electoral entre finalistas, argumentando una aparente preferencia hacia ciertos concursantes, a quienes incluso categorizó siguiendo un sistema de clases.
Este no es el primer episodio en el que Cristina expresa su insatisfacción con la producción a cargo de Zeppelin TV. Previamente, se quejó de que una carta enviada por la novia de Juan nunca fue mostrada en el programa, lo cual cree que pudo haber impactado negativamente en el estado anímico y el desempeño de su hijo en la competencia.
Durante el debate en cuestión, Cristina interrumpió la transmisión para protestar, exigiendo igualdad de condiciones para todos los participantes y el respeto por los turnos de palabra y las preguntas formuladas. Añadió además que, a diferencia de otros concursantes que recibieron mensajes grabados de sus seres queridos, Juan no recibió tratamiento similar, hecho que describió como “lamentable”. El hecho de que solo un concursante, Violeta, reconociera a la persona en el video enviado a los participantes, fue presentado por Cristina como evidencia de la desventaja de Juan.
El presentador del programa, Ion Aramendi, intentó calmar la situación, prometiendo más oportunidades y preguntas para todos los participantes. Sin embargo, las interrupciones y demandas de Cristina generaron un momento de tensión, culminando con un llamamiento al respeto por parte de Aramendi.
Este incidente es un reflejo de las intensas emociones y pasiones que el reality «Gran Hermano» continúa despertando entre los concursantes y sus familias, destacando a la vez las complejidades inherentes a la producción de uno de los programas de telerrealidad más vistos a nivel global.