El presidente de la Generalitat Valenciana, Carlos Mazón, ha generado una controversia significativa al ausentarse más de dos horas de una reunión de emergencia dedicada a la gestión de la DANA para asistir a un almuerzo en el que ofreció la dirección de À Punt a Maribel Vilaplana. Este encuentro ocurrió en Valencia en un contexto crítico, marcado por las inundaciones que afectaron a la comunidad, lo que ha suscitado un intenso debate sobre las prioridades del mandatario en un momento de crisis.
Maribel Vilaplana, quien cuenta con una notable trayectoria en medios de comunicación tanto en el ámbito valenciano como nacional, rechazó posteriormente la oferta de Mazón. Su carrera profesional incluye destacados roles en RTVE Comunidad Valenciana y Canal 9, donde mostró un firme compromiso con el periodismo en momentos decisivos para la región. A pesar de haber dejado la televisión en 2013, su influencia sigue siendo palpante en el panorama comunicacional de Valencia.
Este episodio pone de relieve la interacción incesante entre la política, los medios de comunicación y la gestión de emergencias. La decisión del presidente de desviar su atención hacia un asunto no relacionado con la crisis ha provocado un torrente de críticas y reflexiones sobre el ejercicio de la responsabilidad pública. En un momento en que la comunidad lidiaba con las devastadoras consecuencias de la DANA, las prioridades de Mazón han quedado en entredicho, abriendo un espacio para la discusión sobre el papel de los líderes en tiempos de crisis y su necesidad de concentrarse en las urgencias que afectan directamente a los ciudadanos.
