En una reciente y emocionante entrevista televisiva, José Ortega Cano, el conocido torero retirado, ha compartido una crónica detallada de su traumática experiencia tras sufrir un accidente en el Metro de Madrid. Este hecho, que aconteció hace tres semanas, lo dejó con serias lesiones y ha sido motivo de gran preocupación entre sus allegados y seguidores. Ortega Cano realizó este testimonio durante una conexión por videollamada con el programa «Y ahora Sonsoles», conducido por Sonsoles Ónega en Antena 3.
El desafortunado episodio tuvo lugar cuando Ortega Cano, después de hacer unas compras, se dirigía a tomar las escaleras mecánicas. Un jersey de otro viajero se enganchó en el mecanismo de las escaleras, causando una parada abrupta. En la confusión que siguió, Ortega Cano cayó, siendo arrollado por otras personas y sufriendo una fractura en el húmero izquierdo. Este hueso, vital para el movimiento del brazo, se rompió en el incidente, causándole un inmenso dolor y complicaciones.
Durante su relato, un Ortega Cano visiblemente afectado, compartió el dolor y la confusión que sintió en los momentos inmediatamente posteriores al accidente. “Lo pasé muy mal, no sabía lo que me había pasado”, confesó. Además, el dolor no se limitó a su brazo, sino que también experimentó molestias significativas en sus riñones y cabeza, lo que ilustra la gravedad de su caída.
A pesar de los esfuerzos de la presentadora por aligerar el tono de la conversación, comparando el accidente con los peligros enfrentados en su carera taurina, Ortega Cano enfocó sus comentarios en su actual proceso de recuperación. Aunque sigue en rehabilitación, con su brazo aún en cabestrillo, el dolor persiste, especialmente cerca del hombro izquierdo, y existe la preocupación de que sea necesaria una operación para restaurar por completo la funcionalidad de su brazo.
Ortega Cano espera una evaluación médica definitiva que determine si la cirugía es el paso a seguir, subrayando la agonía y la incertidumbre que este accidente ha traído a su vida. La situación ha despertado una ola de apoyo por parte de sus seguidores, amigos y familia, particularmente de sus hijos, quienes han sido fundamentales para su recuperación.
Más allá del personal drama de Ortega Cano, este incidente ha reavivado el debate sobre la seguridad en el Metro de Madrid, resaltando la necesidad de revisar las medidas preventivas para garantizar la seguridad de sus usuarios y evitar que sucesos como este se repitan en el futuro.