La Audiencia Provincial de Ciudad Real ha condenado a J.M.L.E., un librero de avanzada edad, a seis años y tres meses de cárcel por el homicidio de un hombre que intentó robar en su propiedad en el Parque Forestal de La Atalaya. Este individuo, que contaba con antecedentes judiciales por robos, fue sorprendido por el librero sustrayendo herramientas en su casa de campo en la madrugada del 1 de agosto de 2021.
Ante la situación, el librero disparó en dos ocasiones al presunto ladrón, causándole heridas mortales. Tras un juicio con jurado popular, J.M.L.E. fue declarado culpable, lo que llevó a la Fiscalía a rebajar la petición de pena de doce años a seis, considerando la eximente incompleta de alteración psíquica y la atenuante simple de confesión en el veredicto.
La Audiencia determinó que los disparos fueron realizados con intención de matar, ya que el librero efectuó un primer disparo en el tórax sin previo aviso y un segundo por la espalda, ambos a corta distancia. Como consecuencia de este trágico incidente, los familiares del fallecido recibirán indemnizaciones, con los padres obteniendo 48.000 euros cada uno y los hermanos 19.000 euros por cabeza por responsabilidad civil.
La noticia ha generado controversia en la sociedad, planteando debates sobre el uso de la fuerza letal en situaciones de intrusión y robo en propiedades privadas. La sentencia impuesta al librero pone de manifiesto la importancia de respetar el principio de proporcionalidad y el derecho a la legítima defensa, así como la necesidad de buscar alternativas no violentas para disuadir a los delincuentes.
En definitiva, este caso sirve como recordatorio de las consecuencias legales y morales de recurrir a la violencia en situaciones de riesgo, destacando la importancia de actuar con prudencia y responsabilidad en todo momento.
