Inicio Noticias Peleas por Mascotas: La Custodia Animal en el Centro de Juicios de...

Peleas por Mascotas: La Custodia Animal en el Centro de Juicios de Separación

0

La custodia de mascotas en casos de separación o divorcio se ha convertido en una preocupación creciente para muchas parejas en la actualidad. Al igual que sucede con los hijos menores, la determinación de quién asumirá la custodia de la mascota exige una evaluación exhaustiva del bienestar del animal y los intereses de los miembros de la familia.

Existe una idea errónea común de que, en caso de separación o divorcio, la persona registrada como titular del animal será quien mantenga su custodia sin necesidad de discusión. Sin embargo, este no es el caso. La abogada de divorcio Nerea Forcelledo, con sede en Oviedo, aclara que la decisión sobre la custodia de la mascota no depende necesariamente de quién es el titular o propietario, sino de otros factores más amplios.

La legislación civil, desde 2022, permite resolver la custodia de los animales de compañía dentro del proceso de una separación o divorcio. Esto posibilita regular conjuntamente la custodia de los hijos y las mascotas, una evolución significativa en la protección de los derechos animales y las dinámicas familiares.

Forcelledo subraya que además de decidir si la custodia será compartida o exclusiva para uno de los cónyuges, se debe establecer una contribución económica que cada miembro de la ex pareja realizará para el mantenimiento del animal. Es preciso destacar que estas regulaciones legales se aplican exclusivamente a las parejas casadas.

Las parejas no casadas enfrentan desafíos adicionales. En su caso específico, la ley no prevé la creación de un Convenio Regulador ante el Juzgado para definir la situación de las mascotas, lo que complica la custodia y cuidados de los animales de compañía. Para estas situaciones, Nerea Forcelledo recomienda tratar de alcanzar un acuerdo y documentarlo de manera que vincule a ambas partes, especificando claramente las obligaciones y derechos en relación con la mascota.

Si no se logra un acuerdo amistoso, aún existe la posibilidad de regular judicialmente el régimen de cuidado del animal, así como establecer un régimen de visitas y los gastos necesarios para su sustento. Durante este proceso, el animal deberá permanecer con su propietario.

En resumen, tanto para parejas casadas como no casadas, la custodia de las mascotas se ha convertido en un punto crucial de consideración durante las separaciones y divorcios, y la ley ha comenzado a adaptarse para abordar estos desafíos, buscando siempre el bienestar animal y un equilibrio justo entre los intereses de los involucrados.

Salir de la versión móvil