En una celebración que promete ser tan emotiva como espectacular, Joaquín Sabina ha decidido poner punto y final a su prolífica trayectoria musical con la gira «Hola y adiós», un último adiós que llevará al estimado cantautor por América, España y distintos rincones de Europa desde febrero hasta noviembre de 2025. A lo largo de este itinerario de despedida, Sabina hará paradas en países como México, Estados Unidos, Costa Rica, Colombia, Perú, Chile, Uruguay y Argentina, antes de regresar a España y concluir su periplo en algunos países europeos, cuyas fechas específicas serán reveladas próximamente.
Esta última aventura musical no sólo marca el cierre de una era de medio siglo de canciones y recitales, sino que también abre un espacio de agradecimiento y conmemoración al apoyo inquebrantable de sus seguidores. La última vez que Sabina salió de gira, atrajo a más de 700,000 personas a través de 60 conciertos, un testamento al cariño y la devoción que sus fanáticos le profesan. La expectativa es que el lanzamiento de las entradas en España en septiembre de 2024 genere una respuesta entusiasta de parte de su audiencia.
Más allá de los números y las localizaciones, lo que hace de «Hola y adiós» un evento trascendental es el significado emocional tejido en cada concierto, una oportunidad final para que las canciones de Sabina sean escuchadas directamente de su voz ante una multitud. El propio entorno del cantautor habla de esta gira como un momento único para decir adiós a himnos que han marcado generaciones, canciones que «nunca más serán cantadas ante miles de personas por su propio autor».
La cercanía y el cariño dentro del círculo de Sabina se hicieron patentes cuando Pancho Varona, guitarrista y colaborador de largo plazo, compartió en redes sociales un emocionante mensaje citando una canción que escribieron juntos hace más de dos décadas, reflejando la profundidad del vínculo que une a todos los que han sido parte de esta trayectoria.
«La gira “Hola y adiós” se perfila como un espectáculo imponente en producción y en emociones, un repertorio que abarcará desde los clásicos indiscutibles hasta sorpresas que aún están por descubrir. Se trata de un homenaje a la carrera de un artista que ha dejado una marca imborrable en la música en español, prometiendo conciertos que se quedarán grabados en la memoria colectiva de quienes tengan la fortuna de asistir.
Así, mientras Joaquín Sabina se prepara para despedirse de los grandes escenarios, su legado parece lejos de decir adiós. Con cada nota y cada verso, el cantautor asegura que su voz, aunque no resonará más en estadios llenos, seguirá viva en las corazones de quienes lo han seguido a lo largo de los años, y en aquellos que se sumen en este último adiós.
